Sesión Grupal de Conexión con la Frecuencia AMOR facilitado por Gabriela Añasco y Claudia Bigi
Sesión Grupal de Conexión Iluminando el divino femenino con la Frecuencia AMOR, facilitado por «Haz de Luz» formado por Gabriela Añasco y Claudia Bigi, ellas trabajan al mismo tiempo con cada persona. El martes 2 de Octubre de 17 a 20h. Aportación 60€
Una gran oportunidad para impulsar el crecimiento y la coherencia con la voz de nuestro Corazón, normalmente no le escuchamos, parece incluso loco hacer caso a esa voz que nos guía.. Qué ocurriría si estuvieses tan conectado contigo mismo que todo se sincronizase y fluyese de forma natural?!
Esperamos siempre que otros sean fieles, nos escuchen ó nos aporten aquello que creemos necesitar..
Estar en armonía con nosotros mismos genera sincronía, y todas las circunstancias de nuestra vida empiezan a acomodarse de forma natural..
Te invito a experimentarlo con» Haz de Luz» en su Tour por España.
Si estáis interesados en sesiones individuales para el 1 de octubre y el 2 por la mañana, son sesiones de 1.30h y el importe 70€, las 2 trabajan al mismo tiempo con la persona, canalizando y la persona puede hacer preguntas.
Para apuntaros o cualquier consulta llamar al Centro 983290218
Claudia Bigi
«Quizás nos falte recordar que no hay camino hacia la luz que no implique pasar por cuevas oscuras » Y sí…el camino a lo largo de ésta vida me ha llevado a lugares donde sin saberlo, aprendí a formar la !mujer que hoy soy .
Desde muy chiquita comencé a recibir mensajes de seres de luz , a canalizar energías muy amorosas y también almas que ya no estaban físicamente en este plano , a verlos , escucharlos y a transmitir lo que me pedian que dijera a los adultos , para mi era algo lógico nunca dudé.
Ya en la adolescencia no tenía con quien compartir esta experiencia, quería ser como todas las personas de mi edad . Entonces cerré el canal ( o al menos eso creí ) e intenté vivir una vida «normal» , estudié , trabajé, fuí mamá, esposa y en el camino también despedí con mucho dolor a seres muy amados …
Entre los aňos 2000 y 2013 viví internaciones, cirugías, terapias intensivas , ahí fue cuando mi cuerpo energético se apartó de mi cuerpo físico, desde ese lugar podía observar todo lo que sucedia a mi alrededor muy claramente , me sentía muy liviana y quería seguir estando allí , en un instante me vi rodeada por unos seres muy altos y luminosos que me impedían seguir avanzando , entonces muy suavemente escuché una voz » todavia no» entonces comprendí lo que estaba pasando y en un suspiro comencé a sentir la pesades de mi cuerpo contra la cama , las canulas en mis venas , el oxigeno, las heridas y el llanto de mi compaňero a mi lado … Todo lo vivido fue necesario para entender que es imposible negarme a mi misma y que el proceso parece lento pero es perfecto , porque hasta la desconexión sirvió para crecer y nutrirme de conocimientos .
Hoy lo puedo entender. Hoy vuelvo a conectar con mis guias que siempre estuvieron conmigo. Hoy tengo la bendición de poder compartir quien soy con almas afines que me inspiran . Hoy comparto este trabajo almico con mi amiga y compaňera Gabriela Aňasco con quien formamos «Haz de Luz» . Hoy somos muchos y nos estamos encontrando . Hoy recuerdo quien soy, de dónde vengo , y porque estoy en éste planeta.
Lo comparto con ustedes porque hoy sí puedo hacerlo.
Esta soy yo , viviendo una experiencia humana , un ser en calma que colabora en el despertar de otras almas , canal divino entre el cielo y la tierra , que expande su vibración en luz amorosa y sanadora ….lo mismo que es cada uno de los seres que habita éste universo.
Maria Gabriela Añasco
Mi nombre es Maria Gabriela Añasco, nací el 15 de abril de 1986 en Bahía Blanca provincia de Buenos Aires.
Se podría decir que tuve una infancia sana, en familia y cerquita de la naturaleza y bajo la tranquilidad y silencio de un pueblito Nicolás Levalle (Villarino). Después de completar la primaria, me fui a Médanos ( a 40 km de Bahía Blanca) para seguir estudiando y trabajar, recibiéndome así, de adulta y me especialicé en la Gestión Contable e Impositiva y la administración.
Pero me faltaba algo: El poder ayudar a las personas, comenzó a sonar cada vez más fuerte dentro mío. Siempre sentí ese llamado para ayudar como sea, escuchando o con la palabra. Fue en el 2011 (gran año!) donde comencé un intenso camino de auto conocimiento y sanación que me transformó de todas las formas posibles, y así, encontré al Reiki como una valiosa herramienta para mí y para las personas que tenía la necesidad de ayudar. Ese paso – pequeño pero no menos importante – me permitió abrir nuevas posibilidades y personas especiales entraron a mi vida, como verdaderos maestros, gente maravillosa de la que estoy agradecida por siempre. Y una vez más, crecí.
Como en una sincronía maravillosa, llegué a una nueva técnica vibracional: Tameana. canalizada por Juan Manuel Giordano, el crecimiento fue acelerado e intenso. Y así fue que tomé las mejores decisiones: dejé mi trabajo administrativo, para dedicarme full time a brindar terapias y cumplir con mi propósito original. Claro que tuve miedo! Tuve que dejar atrás ideas, creencias, barreras que yo misma me ponía y estructuras que durante años había trabajado interiormente. Pero por sobre todas las cosas, tuve que lograr una fuerte CONFIANZA EN MI Y UNA GRAN ACEPTACIÓN DE LO QUE SOY.
Así fue creado “ Haz de Luz”, con mucho entusiasmo y gracias al equipo que conformamos con mi gran compañera Claudia Bigi, aprendí a trabajar en Sesiones Grupales, permitiéndome crecer y seguir enfrentando cada miedo que se presentaba saliendo de la famosa zona de confort que tanto me invitaba a quedarme ahí.
Hoy vivo de lo que amo, ser un canal que sirve de guía para el despertar de cada persona que toma la decisión de reencontrarse con su ser interior, empoderándose, evolucionando, reinventándose en armonía y con amor. Disfruto de cada sesión porque me reflejo en cada uno y aprendemos juntos. Ambos crecemos.
Esta soy yo, humana, un ser espiritual en un cuerpo físico, como vos, como todos, que busca ser más y más consciente día tras día. Nadie dijo que iba a ser fácil, pero vale la pena cada pasito, cada caída, cada lágrima, cada toma de consciencia, cada satisfacción, cada alegría compartida.
Puedo decir por fin, que solo soy eso que ves. Ni más ni menos. Cada día que pasa, elijo estar donde estoy, en armonía y escuchando la belleza de mi corazón.
Caminar juntos se hace más liviano…